domingo, 15 de marzo de 2009

La Infidelidad


La infidelidad dentro de una pareja supone romper la lealtad que se tiene hacia el otro miembro de la pareja.

Las parejas tienen una serie de “leyes” por así decirlo, las cuales varían de una pareja a otra.
Estas “leyes” si se hablan y se comparten, son factores fundamentales para que se fortalezcan los pilares de la relación, pero en muchas ocasiones se dan por supuestas, eso es un grave error, ya que quizá las leyes de uno nada tienen que ver con las del otro, por eso lo mejor es sentarse y aclarar posturas e ideas de lo que significa la pareja y de lo que se desea tener y llegar a conseguir. Esto dicho así, puede sonar muy frío, porque puede sonar a negocio o contrato mercantil, pero es la única manera de no llevarnos las manos a la cabeza cuando no se cumplan por no haber hablado, además por mucho que queramos a nuestra pareja, no puede leer nuestra mente, por lo tanto es mejor facilitar las cosas.

En nuestros días la infidelidad ha pasado a centrarse casi exclusivamente al engaño con otra persona, en el plano sexual. Es muy conocido el término “poner los cuernos”, a mí personalmente me parece un término bastante duro y desagradable, porque todas las infidelidades tienen una explicación y no se ha de ser tan cruel.

Evidentemente si tu estas bien con tu pareja, no tienes ganas de acostarte con otra persona, porque tu pareja te llena en todos los aspectos y por supuesto en el terreno sexual. Aunque evidentemente somos humanos y todos tenemos debilidades y fallos y en algún momento podemos tener algún desliz, exactamente igual que un día nos podemos emborrachar sin necesidad de ser por ello unos alcohólicos.

Cuando en la pareja empiezan a haber infidelidades, es un claro síntoma de que algo no funciona, que esa pareja ya está dejando de ser pareja aunque compartan la misma vivienda, en esos casos diríamos que no se rompe la convivencia seguramente por distintas causas sociales, pero la pareja como tal ya está rota.

La Monotonia


Algo muy peligroso en la pareja, es cuando pasamos a ser tres: ella, él y la monotonía.

Antes incluso de formar la pareja, en esos primeros momentos donde nuestro cuerpo está completamente alterado solamente con pensar en esa persona tan especial, nos encontramos en un mar de estímulos que nos mueven cuerpo y mente, nos sentimos especialmente vivos y nuestra cara tiene un brillo especial, nuestros ojos, nuestra mirada lanza destellos de luz y quiere gritar al mundo la felicidad que siente.

Por supuesto que estas sensaciones y emociones no pueden durar toda la vida, porque en realidad es como una situación de estrés continuo, donde tenemos activados demasiados sistemas de nuestro cuerpo y esto no puede perdurar en el tiempo, porque aunque no lo creamos, perjudicaría nuestra salud física y mental. Así que teniendo esto claro debemos estar preparados para que cuando pase tanta actividad no sea sustituida por la monotonía.Nuestra vida diaria suele ser ordenada, compuesta por horarios y obligaciones, pero no podemos dejar que nuestra relación de pareja entre en el mismo camino. Si llevamos un tiempo conviviendo juntos se puede llegar a una vida lineal, sin sorpresas, sin asombros y entonces la rutina entrará de lleno. Tendremos la sensación de que todo está dicho ya, que conocemos a nuestra pareja casi más que a nosotros mismos, aunque sepamos que en el fondo jamás se llega a conocer del todo a nadie.

Será muy difícil que nos entusiasmemos por algo. El aburrimiento y la monotonía tienen la cualidad de apagar las ilusiones, y o ponemos algo de nuestra parte o será complicado salir adelante.

Si las dos partes de la pareja están infectadas por la falta de motivación, entonces el aburrimiento, la apatía y la desilusión convivirán con nosotros.

Los cimientos de nuestra relación se tambalean, solo tenemos dos opciones, o los apuntalamos, o dejamos que se desmoronen.

No debemos en ningún momento intentar acaparar a la otra persona.

En realidad si la monotonía y el aburrimiento ha llegado a nuestras vidas, significa que algo falla, que algo va mal, que se perdió la ilusión y el amor se ha desgastado, en ese momento sería ideal hablar y exponer lo que ocurre entre la pareja, como personas civilizadas y si en realidad los dos sienten lo mismo, los dos están aburridos y desilusionados, diluir la pareja antes de llegar a no soportarse el uno al otro, sería lo ideal y que cada uno viviera su propia vida por separado, pero esa es la teoría…… a la práctica cuesta un poco mas por lo general porque no es fácil dejar, porque aunque de común acuerdo se decida diluir la pareja, siempre habrá uno que será el que toma la iniciativa de dejar al otro.

Pero hay que ser un poco egoístas en ese tema y pensar.... que vida solo hay una y hay que vivirla lo mejor posible.


sábado, 14 de marzo de 2009

Relación en pareja


Para tener una buena relación de pareja hay que tener en cuenta mucho puntos, sobre todo a la hora de convivir con alguien, tenemos que darnos cuenta que en el momento que se forma una pareja nuestra vida cambia, debemos compenétranos para tener una relación lo más óptima posible.

Para ello son muy importantes las dos C, la Confianza y la Complicidad.

La Confianza en la otra persona es esencial, porque si no confías siempre aparecerá un mar de dudas y empezaran a florecer los celos y eso acaba con cualquier relación, ya que los celos en pequeñas dosis son normales y hasta podrían estimular esa relación, pero los celos en grandes dosis, es como un cáncer que va destruyendo poco a poco.

Una comparación de los celos en la vida diaria seria como la sal en las comidas, un poco le da sabor, pero si vuelcas el salero entero…. No hay quien se lo coma.

La Complicidad es necesaria para realizar cualquier cosa en pareja, para realizar los juegos amorosos incluso.

Todos nosotros, somos seres individuales y cada uno de nosotros tenemos nuestro pasado, nuestras costumbres, familia, recuerdos, amigos, nuestras propias manías. Cuando el amor llama a nuestra puerta no somos capaces de ver que nuestro ser amado tiene no solo virtudes, sino también defectos, ya que todos somos seres humanos y la perfección no existe y hemos de pensar que la convivencia es difícil y muchas veces cuando el tiempo pasa, parece que nos sorprenden esas manías que probablemente parece que han surgido de la nada, pero no, eso no es así ya estaban ahí lo que ocurre es que el amor o nuestro estado de enamoramiento, no nos lo dejaba ver. Cuanto antes asimilemos estos pequeños detalles, mejor será para nosotros. Este mismo trabajo tiene nuestra pareja. Pero no hay que asustarse porque normalmente son pequeñas cosas que se pueden resolver con facilidad, por eso lo mas importante en una pareja es el Dialogo y la Comunicación, el hablar claro desde un principio, el mostrase siempre cada uno tal y como es, no es bueno intentar camuflar nuestro comportamiento y nuestros gustos solo para agradar a la otra persona, porque tarde o temprano saldrá nuestro verdadero carácter.

La Comunicación es algo muy importante y suele ser una de las primeras cosas que falla, si mantenemos una comunicación fluida con nuestra pareja todo será mucho más fácil. Si te enfadas con tu pareja será más fácil que le digas abiertamente qué es lo que te ha molestado a que esperes a ver si descubre qué te ocurre, ya que probablemente no acertará nunca, ya que los hombres no piensan igual que las mujeres.

Simplifica problemas con la comunicación, además esto hará que estéis más compenetrados y la complicidad entre vosotros aumentará de forma exagerada.

Pero no se nos puede olvidar la individualidad de cada uno, comparte, pero pon límites para poder tener una autonomía y dependencia, es decir, ser uno en cuestión de pareja pero sin olvidar que está formada por dos seres individuales que cada uno de ellos tienen sus necesidades y necesitan tener su espacio y su tiempo de manera individual.

Como ya comentábamos antes, la Confianza entre la pareja es el pilar fundamental de una relación, sin ella esa relación se tambaleara pronto, porque un miembro de la pareja salga solo a tomar un café con un amigo no implica necesariamente que nos quiera menos, si no que necesita su intimidad, quizá el amigo o amiga quiera contarle algo personal, o quieras contarle algo a ese amigo o amiga, porque algo que se tiene que tener muy claro es que los amigos son los amigos y no se deben dejar a un lado por el simple hecho de que tengamos una pareja y como ya hemos dicho antes somos seres individuales y los amigos los elegimos individualmente.

Por distintas circunstancias, bien sean de trabajo o de cualquier otra índole, muchas parejas tienen que separase temporalmente, con las nuevas tecnologías es muy fácil estar en contacto, pero aun así, a veces es imposible, en tales casos si no hay una confianza mutua empezaran a surgir las dudas y la desconfianza y terminara surgiendo una grave crisis que podría romper la pareja, de ahí la gran importancia de la Confianza mutua.

¿Quién no se ha enamorado alguna vez?


¿Quién no se ha enamorado locamente……?, quizá pensaba que sí y luego resulto ser que no, hay veces en los que los sentimientos se confunden, pero uno se da cuenta por el tiempo de si de verdad esta enamorado o simplemente es una ilusión o una mera atracción, pero el caso es que en esos momentos en los se que esta enamorado de forma descontrolada y pasional se viven experiencias irrepetibles.

Enamorarse así puede llevarte a la felicidad más indescriptible, pero si tu amor no es correspondido aparecerá una tristeza abrumadora y todo te resultará insuficiente para poder salir de allí.

El amor es un sentimiento que te puede subir a las nubes y llenarte de felicidad total y al mismo tiempo hundirte totalmente en el fango.


Ante esta situación nos encontraríamos ante dos estados emocionales, el de la unión, que seria un amor correspondido que llevaría consigo una sensación de éxtasis y felicidad, y el de la separación, que se trataría de aquel amor no correspondido que viene acompañado de ansiedad y un sentimiento intenso de vacío… En todo caso se puede apreciar tanto en un caso como en el otro, que estamos ante un estado de activación fisiológica muy importante para nuestras vidas y eso influye enormemente en nuestra manera de comportarnos día a día en cualquier cosa que hagamos, porque nuestro estado anímico es todo.Cuando nos enamoramos podemos estar horas y horas pensando en la otra persona, preocupándonos de cómo esté o qué estará haciendo, tenemos deseos de conocerla a fondo y de que nos conozca, incluso podemos llegar a idealizar la relación o directamente a la persona. Aparece una gran atracción sexual y tenemos sentimientos positivos y gratificantes, cuando todo va bien. Pero se transformarán en negativos si no todo va bien. En nuestra cabeza existe el deseo de una unión completa y permanente.Nuestra forma de comportarnos cambia, haremos todo lo posible por saber a ciencia cierta lo que la otra persona siente por nosotros, haremos cosas por ella, llegaran las dudas y los temores, querremos estar juntos el mayor tiempo posible, saber cómo es en todos los terrenos, saber cuales son sus gustos, e incluso con tantas emociones y sensaciones juntas podremos tener comportamientos ilógicos y un poco irracionales, pero en ese momento no nos damos cuenta, porque estamos viviendo en una nube, en un mundo aparte.